IMM 2019: LAS TENDENCIAS QUE VIENEN EN INTERIORISMO
La arquitectura contemporánea de interiores evoluciona y se mimetiza con los modelos económicos y productivos de las grandes ciudades en los que la racionalización del espacio se impone en habitáculos cada vez más pequeños y compactos. Las composiciones modulares y plenamente funcionales esbozan la habitabilidad con los elementos justos y, en una vocación por singularizar estancias, hacen gala también de elegantes y originales minimalismos cargados de estilo y vanguardia.
Asistimos a la impronta de piezas de mobiliario auxiliar que generan estancias y circulaciones con su sola presencia. Es el caso de los demandados aparadores, de brillantes creaciones de sillones con brazo y de la tendencia de los sofás suspendidos sobre pequeños pies metálicos. La omnipresencia de los dispositivos y canales de ocio digitales han convertido a los libros en contadas piezas de exposición que, sin embargo, lucen su caché desde estilizadas estructuras de baldas y en el interior de vitrinas de exposición.
En línea con el presente tecnológico de los hogares del mundo, y especialmente reflejado en los espacios de cocina, se abren camino aplicaciones móviles que participan de la tecnología de la smart home no ya como una solución aislada sino como un elemento integral dentro del mobiliario del hogar.
Otra de las tendencias vistas en la reciente IMM de Colonia ha sido la vuelta de los estampados, limitados hasta ahora a los sofás y exhibidos en los papeles de pared. Los motivos y dibujos se cuelan sutilmente, bien impresos o en relieve 3D, para subrayar piezas de mobiliario como los aparadores.
En cuanto a las tendencias cromáticas, se consolida la paleta de grises claros en combinación con acentos naturales o pastel que, sin embargo, parecen alejarse de la inspiración escandinava para buscar códigos expresivos más vibrantes en el medio natural y en los motivos étnicos. La vanguardia apuesta por combinaciones entre variantes de los colores primarios como si un cuadro de Mondrian se tratara. Al mismo tiempo, los creadores del lifestyle prefieren asociaciones de color más atrevidas e inspiradas en el Pop-Art que combinan tonos de naranja no sólo con verde oscuro, sino también con amarillo, turquesa, petróleo o incluso verde mint. Incuestionablemente, otra de las tendencias de color en interiorismo son los tonos cálidos en versión más oscura que armonizan con maderas de aspecto rojizo como la de caoba. Y el azul oscuro y los diferentes acentos de verde protagonizan propuestas con un guiño al Art Decó en combinación con tonos dorados y bronce.
Para terminar, la madera sigue manteniendo su papel preponderante en el interiorismo. No es sólo sostenible, sino también acogedora, saludable y versátil. Reivindica de manera especial un acabado natural, no totalmente rústico pero sí con textura y veteado visibles. A continuación, el metal se viste normalmente de colores cálidos de alta pureza o de pátinas en dorado o bronce y hace acto de presencia no sólo en las bases o pies de sofás y mesas, sino también en elementos decorativos como iluminación, mesas y elementos de pared. Por su parte, el cristal defiende un importante tercer puesto entre los materiales en tendencia del interiorismo contemporáneo que también contempla la influencia del mimbre y, sobre todo, de la piedra natural como elemento de lujo. La piel sugiere un uso contenido y elegante mientras que entre los tejidos clásicos y los tapizados cobra protagonismo el seductor terciopelo.