Gracias a la nueva superficie BOSSA, los módulos de la cocina ya no se perciben como componentes funcionales, sino como un elemento más del hogar; en esta composición la cocina se reduce a dos hileras de muebles bajos, mientras que el resto de muebles es como si formaran parte de los revestimientos de vivienda. En la entrada, a lo largo del pasillo y en todo el espacio de la cocina: los grandes elementos murales de orientación vertical unifican la estética de la vivienda. Las superficies murales con acanaladuras verticales crean un efecto rítmico ascendente y extraordinariamente vital.
Este espectacular diseño, en el que destaca la ausencia de tiradores, transmite una sugestiva sensación de calma y uniformidad gracias al veteado de la madera BOSSA.
Serenidad, amplitud, vitalidad: con el revestimiento BOSSA, LEICHT presenta un nuevo tipo de frente que hasta ahora no existía en el mercado y que permite crear un lenguaje visual completamente nuevo tanto en la cocina como en el resto del hogar. El sofisticado frente de madera auténtica con chapa de roble o nogal convierte cada cocina en un espacio único.
El programa F45 C1 de los muebles bajos destaca sobre el fondo de madera de las superficies BOSSA. El color blanco nieve de material Fenix NTM neutraliza el conjunto: un material ultramate, suave al tacto, antihuellas y reparable. Las propiedades inteligentes de este resistente material se han impuesto en el mercado actual de las cocinas. Aunque en este momento existen numerosos laminados alternativos que compiten entre sí, Fenix NTM sigue siendo el original y se ha convertido en un símbolo para los usuarios más exigentes.